Luna Llena




Hola una vez más a ti que me acompañas en este viaje de autoconocimiento. Y si es la primera vez que andas por estos rumbos, pues te invito a leer las anteriores entradas para que estés al día y puedas tener una mejor comprensión de todos los temas. 

Se acerca la Luna Llena y damos la bienvenida a un momento especial dentro de nuestro ciclo, que no por ser corto es menos importante. Desde la pasada Luna Nueva hemos visto cómo ha ido incrementándose la luz en ella para poco a poco ir pasando desde Luna Nueva visible, primer Cuarto de Luna, Luna Gibosa hasta la fase donde más luz y por tanto más energía emana nuestra madre, Luna Llena, así que vamos como siempre a hablar de ello. 


La fase de Luna Llena es la preferida de muchos, su belleza, magnetismo y las emociones que hace surgir en nosotros tienen un poder enorme, y estoy segura de que en más de una ocasión has dirigido unas palabras a ella, ya sea un deseo, una confesión o simplemente una mirada o pensamiento.

Ovulación.

En este momento el cuerpo femenino se encuentra aún en la fase folicular de la que ya antes habíamos hablado, alrededor del día 14 de nuestro ciclo, o sea, en la mitad de uno de 28 días (esto puede variar teniendo en cuenta la duración de tu periodo menstrual) las hormonas que produce nuestro cuerpo en esta fase posibilitan que el óvulo madure y se debilite la pared folicular, causando que este sea liberado e inicie su descenso por las trompas. Tal proceso es lo que conocemos como ovulación, el óvulo queda entonces en el útero esperando a ser fecundado, allí estará entre 12 y 24 horas y de no producirse la fecundación pasamos entonces a la siguiente fase, la fase lútea, de la cual hablaremos más adelante. 

Como ves en nuestro cuerpo ha llegado el momento de la posible gestación y esto implica que nuestras energías cambian, y las volcamos hacia el exterior, preparándonos para el cuidado de ese futuro ser, pero si no sucede la fecundación las energías propias de estos días volverán a cambiar. Ahora durante este momento brevísimo estamos volcadas hacia los otros y más propensas al cuidado y protección de los demás, esto nos recuerda al Arquetipo de esta fase que no es más que La Madre, ¿y no es esto precisamente lo que una madre hace? Durante estos días estaremos muy atentas a nuestro entorno, serviciales y protectoras. 

Es este un momento en el que nuestro cuerpo manifiesta una acción a traves del óvulo, su única oportunidad del ciclo y al no haber fecundación, aquello que ya no es útil (óvulo y endometrio) lo comienza a preparar para su eliminacion en forma de sangrado posteriormente.


 Bueno pues con nuestras energías sucede igual es un momento de valorar, solo valorar, revisar, cuales son las cosas que ya no nos parecen tan necesarias, que dificultaran el logro de nuestros objetivos, lo que no queremos en nuestras vidas y prepararnos para su eliminación.

Recordemos que durante la luna nueva sembramos una intención en la que hemos estado trabajando de forma más activa y creativa, pues ahora llega el momento de evaluar cuales son las energías, personas, actitudes etc. que no se ajustan con el logro de esa intención y que ya no nos son útiles en nuestro proceso de crecimiento. Hasta este momento nuestra actitud y acciones han estado activas, externas, hemos podido cumplir con las demandas laborales, sociales y con ser la mujer multitareas que se supone que seamos siempre, pero ojo, esto está a punto de cambiar y por eso este momento es tan importante.


Magia y Luna Llena

Hablando un poco de magia y de cómo utilizar la energía lunar para ella, vemos que esta fase es la predilecta cuando se quieren realizar rituales para atraer el éxito, potenciar el amor y  rituales de atracción. Es el momento de máxima energía por lo que todo aquello que se pida a la luna o se trabaje con su energía, tendrá muchas más posibilidades de éxito, por esto cuidado con lo que pedimos y nuestras intenciones detrás de cada petición. Es momento para cargar nuestras piedras y cristales, obtener agua lunar (de esto hablaremos más adelante en otra entrada) de energizar talismanes y amuletos. Pero recuerda que también es un punto de inflexión, de cambio de análisis para encontrarnos de frente a las cuestiones que debemos desechar y saber que queremos atraer.

A partir de este momento nuestro cuerpo iniciará una fase completamente diferente a la que hemos vivido. La fase oscura de la luna nos influye de una manera distinta, y no debemos desaprovechar dicha energía porque es muy útil para nuestro desarrollo y la conexión con nuestro ser interior. Se inicia entonces la fase menguante y se abren las puertas a la progresiva oscuridad de la luna y la nuestra, de ella hablaremos en la próxima entrada, vamos a tratar de entenderla y despojarnos de las creencias y doctrinas que la rodean para poder ver su verdadera utilidad. ¿Te suena algo conocido como Síndrome Premenstrual? Hacia allá vamos. Entonces … ¿Tenemos una cita en la siguiente fase? Espero que sí, hasta entonces

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